El viento que atraviesa mi cuerpo y suelta una pequeña fila de humo con un aroma no tan extraño me recuerda que el espacio y tiempo son perversos y juegan contigo y conmigo, se ilumina la noche y se calman las tripas que rugen en silencio por pedir mas sustancia activa o menos recuerdos o mas comida y es así como mi ser se desprende del piso y se balance la leve y suavemente de derecha a izquierda y de izq a derecha suavemente para no caer jamás.
Luces y píxeles deformados entran por mis pupilas deseando no encontrarse con mis pensamientos y mi cuerpo entero lo resiente uno a la vez por ser consciente.